Haciendo efectivo el derecho a saber podemos tomar decisiones fundadas que nos acerquen a una sociedad igualitaria en la que se respeten los derechos humanos: Blanca Lilia Ibarra Cadena

 

La Comisionada del INAI participó en el foro ¡Con más información, más voz! Estrategias para romper brechas de género

 

El empoderamiento de las mujeres inicia con el conocimiento y, desde el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INA), este sector de la población cuenta con múltiples vías para conservar y proteger sus derechos, en especial, a la salud, aseguró la Comisionada Blanca Lilia Ibarra Cadena al participar en el Foro ¡Con más información, más voz! Estrategias para romper brechas de género.

 

“En estas fechas, particularmente, en el mes de marzo, acudimos, atendemos y escuchamos en numerosos espacios, la necesidad de seguir empoderando a las mujeres; y el empoderamiento solo se puede dar si hay conocimiento. Y es ahí donde quiero enmarcar mi participación porque creo que, sin lugar a duda, el tema de la salud es vital para todas las familias mexicanas y para todas las personas”, subrayó en el evento convocado por el organismo garante de la Ciudad de México (INFO CDMX).  

 

En el panel “Empoderarnos a través de la información”, la Comisionada Ibarra Cadena destacó la labor de los organismos de transparencia para garantizar el acceso a la información pública y promover el empoderamiento de las mujeres a través del derecho a saber, ya que “haciendo efectivo este derecho se pueden tomar decisiones fundadas que nos acerquen a una sociedad igualitaria, en la que se respeten nuestros derechos humanos”, apuntó.

 

La Comisionada compartió que, de acuerdo con un estudio publicado en la Revista Panam Salud, de la Organización Panamericana de la Salud, en Latinoamérica existen factores que afectan el derecho a la salud de las mujeres. En la muestra de dicho estudio, se observó que la barrera persistente fue la dificultad para obtener dinero para la consulta o tratamiento, en casi un 60 por ciento; seguida por la distancia al establecimiento de salud, con un 36 por ciento; no querer ir sola al establecimiento; y obtener permiso para ir al centro de salud, entre otros factores.

“Por ello, es primordial que, por un lado, se brinde un marco general del derecho de acceso a la información, sobre el cual -en las últimas dos décadas- hemos venido trabajando los organismos garantes que hoy tenemos el privilegio de estar al frente como Comisionadas y Comisionados, para promover el conocimiento en la sociedad y el ejercicio del derecho a saber para que haya acceso a programas educativos, para que las mujeres cuenten con herramientas de gestión de la cosa pública y para hacer efectivos otros derechos”, advirtió.

 

Por otro lado, Ibarra Cadena subrayó que, mediante el derecho de acceso a datos personales, las mujeres pueden obtener copia de su expediente clínico en centros de salud públicos y privados, para fines como una segunda opinión médica, demandar al Estado cuando se tengan afectaciones derivadas de una atención médica irregular, o bien, demandar a prestadores de servicios.

 

En su momento, Claudia Corichi García, Titular de la Unidad de Igualdad de Género y Cultura de la Fiscalización en la Auditoría Superior de la Federación, comentó que hablar del acceso a la información pública es una prerrogativa fundamental que debe defenderse, además de ser un instrumento clave para ejercer otros derechos.

 

“El derecho a la información permite a la ciudadanía definir ciertas circunstancias que pueden afectar su vida cotidiana, así como desarrollar la capacidad para tomar decisiones informadas. Además, permite conocer los mecanismos que contribuyan a la igualdad, a cerrar brechas, y a la inclusión y la autonomía de las mujeres”, dijo.

 

A su vez, Nashieli Ramírez Hernández, Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, planteó tres elementos de análisis para el entendimiento de lo que sucede en el país en cuanto a la igualdad: la educación como derecho; la evidencia de que, a pesar de haber más presencia de mujeres en la educación, esto no se ve reflejado en el mundo laboral; y el hecho de que la mayor brecha de desigualdad se debe a cuestiones socioeconómicas.

 

“Alcanzar la paridad en la matrícula del alumnado en las escuelas, no asegura la igualdad sustantiva en los ámbitos que ponen en juego los resultados del derecho a la educación de calidad, por ello, es preciso dar seguimiento a la transformación estructural de los aspectos que amenazan la posibilidad de que las mujeres puedan seguir estudiando, pero, sobre todo, es preciso revertir los estereotipos sociales”, refirió.

Por último, Andrea Viteri García, Gerente general en Arana y Viteri Gender Consultoras, reconoció la necesidad de visibilizar el aporte de las mujeres al crecimiento económico del país y la importancia de impulsar iniciativas que promueven e impulsen emprendimientos para este sector.

 

“La necesidad de invertir y emprender, da a las mujeres herramientas para salir de condiciones de violencia; además, es necesario seguir invirtiendo en políticas y propuestas que les permitan salir de situaciones adversas”, planteó.

 

El Foro ¡Con más información, más voz! Estrategias para romper brechas de género, se realizó en el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer.